miércoles, 15 de septiembre de 2010
Amantísimo Jesús mío, que no contento vuestro amor con haber bajado del cielo, haber derramado tu sangre en el ara de la cruz y haber instituido el sacrificio eucarístico en la Santa Misa, quisiste venir a la ciudad de salta en tu milagrosa imagen a buscar como pastor divino a la oveja perdida. Y cuando mas olvidada andaba sobre tu paternal amor, hiciste estremecer la tierra y dijiste a tu siervo no cesaran hasta que te sacasen por las calles.
Señor camina las calles pedregosas de mi corazón y vuelvo fértil y dócil a tu Espíritu
Jesús conmueve ver la llaga del hombro donde recostó la cruz, donde recostó el peso de mis pecados. En esa llaga pongo mis miedos, debilidades, desesperanzas, en esa llaga esta la garantía, la invitación ¡vale la pena confiar en vos! esa llaga me habla de resurrección esa llaga me habla de miedo, debilidades, desesperanza resucitadas vencidas.
Hasta el próximo año Señor del Milagro Somos Tuyos por siempre Tuyos
Viva el Señor del Milagro VIVA!!!