Jesús se encuentra sometido
al Juico del Sanedrín… miremos esta imagen… la experiencia de Pedro es nuestra
experiencia, dice le Evangelista Lucas;
“Jesús lo miro y el salió y lloro”
En cambio el
juicio del Señor, no es como el Sanedrín, es una mirada de amor, que en
nuestros tiempo puede ser la mirada de un hijo a sus Padres, que está esperando
que lo atienda… puede ser la mirada de los Padres a su hijo que está esperando
un gesto de protección… puede ser la mirada de su esposa, de su esposo que está
esperando que lo ayude, que le muestre un gesto de comprensión… puede ser la
mirada de nuestros amigos y hermanos que están esperando una actitud distinta…
recorramos las siete estaciones visitando los Sagrarios, caminemos la noche
dejándonos mirar por la mirada del amor. ¡Qué mirada! Sostengamos la mirada, no
nos condena, nos ama, nos da libertad, nos da su vida.
(Martes 3 de Abril 2012)