miércoles, 6 de julio de 2011

un viejo sabio


A menudo somos jueces y abogados de una causa sin razón, un verdugo despiadado en su condena y dictamos la sentencia...
Nos hacemos cuestionamientos de todos los colores, clases y especies, es inevitable, la inconformidad es insospechada, es verdad que el ambiente alimenta esta situación. Pero cuando nos culpamos perdemos la capacidad de disfrutar… vive, vivamos el hoy respirando… sin apurarnos demasiado. Angustia relojera todos tenemos un poco de eso…

Pero un viejo sabio me aconsejo no desesperar, mira que en la vida Robert gana el que sabe esperar…
Pero un viejo sabio me aconsejo no desesperar, gana el que pone ganas, el que lucha hasta el final…

Me sonrió... se despidió... cuando quise abrazarlo desapareció…