Hay realidades que necesitan ser añejadas…
El asombro… tenemos que recuperar el brillo y la espontaneidad de los sencillos milagros a diarios.
Jesús, recrea en mi corazón la capacidad de asombrarme…
¿Dónde está el sentido de las cosas… donde están las respuestas… y porque me genera nuevas preguntas…?
Jesús regálanos, regálame, la capacidad de disfrutar y gozar de lo soy, lo que tengo y lo que vivo.
El abuelazgo es un rol esencial e insustituible ¿y los niños? También. Ellos son dos extremos, que se unen, ambos comparten sueños y juegos. Los abuelos se vuelven niños con ellos y por el contrario ellos viejos sabios aun siendo niños.
Piensa un segundo en tantos viejos y ancianos que Dios te puso en la vida…
Yo siempre recuerdo a tantos viejos que me dieron su mejor consejo, y cuya sabiduría hoy escriben la mas de las veces en este blog, entre tantos, está el querido Padre Justo, Rosita, un viejo amigo compañero de Misa los Sábados, Marito ALF Barrionuevo y tantos otros…
También recuerdo aquellos que ya no están… a mis Abulas (abuelas) y Abuelos, hay día que quiero estar con ellos, sé que me están esperando… algún día volveré abrazarlos.
