El tiempo durante el año marca el primer aniversario de su Matrimonio, tenemos que recordar que aquella Boda, era prenda, fruto de la Resurrección y decía en aquella meditación; que su Matrimonio era; lavar los pies, tomar la cruz y entregarse como el pan y el vino.
Esta vez el aniversario de su Casamiento se desarrolla en los límites de una nueva Pascua, es antesala de la misma.
Jesús Maestro del Amor; su Matrimonio es; Fidelidad de Cristo verdadero Dios – Fidelidad de Cristo verdadero hombre
Fidelidad de Cristo verdadero Dios
“El Señor pasó delante de él (Moisés) y exclamó: ‘El Señor es un Dios compasivo y bondadoso, lento para enojarse, y pródigo en amor y fidelidad’” (Ex 34,6).
La fidelidad es el atributo mayor de Dios que se asocia con su bondad paternal. El Salmo dirá: “Tu fidelidad permanece por todas las generaciones, tú afirmaste la tierra y ella subsiste” (Sal 119,90).
Jesús es Fiel hasta en la cruz nos relata los evangelistas. Dios es fiel a la promesa de Salvación.
Dios es un tan cercano a nosotros que es por exceso de presencia que no lo percibimos. Miren, contemplen... ¿no es verdad?
Recuerden el pacto del casamiento que une la alianza de su amor como una nueva familia.
-Yo prometo serte fiel, en la salud como en la enfermedad, en la riqueza como en la pobreza cuidándote y respetándote, hasta que la muerte nos separe.
Solo queda la fidelidad, ella sola no pasa jamás. No quiero decir que el trabajo, las cosas materiales no sean necesaria y nobles, sino que el sentido del Matrimonio es justamente la fidelidad, el amor. No tiene que ver con un anhelo o un simple refrán.
Es una vivencia una experiencia que la vivimos día a día. Basta con ver en los meses pasados cuando el devastador terremoto que sacudió Japón, una sociedad tan avanzada, prácticamente tenían todas las seguridades pero cuando tembló la tierra todo se vino a la ruina. Es interesante un japonés le respondía a una cronista que le preguntaba; después de todo lo ocurrido ¿que les queda? – lo que ahora nos importa es sobrevivir y estar en familia. Claro es una respuesta lógica es una tragedia, la tierra pudo poner en ruina el sacrificio de muchos años, pero no pudo con el amor y la fidelidad.
Fidelidad de Cristo verdadero hombre
Solo puede ser fiel aquel que ama, porque la fidelidad es el amor incondicional.
Solo podemos ser fieles porque Dios es el primero en ser fiel, solo podemos amar porque El nos ama primero.
JESUCRISTO, GARANTIA DE FIDELIDAD
Hemos de partir siempre de que las personas son débiles, inclinadas con frecuencia a olvidar sus compromisos, y que nuestro mundo siempre quiere hacernos ver las cosas como no son...
¿Quién les puede asegurar a ustedes dos que serán fieles? ¿Que garantía tienen de que este amor que hoy cumple 1 año en Dios, no se agotará dentro de algún tiempo? No piensen que el sacramento actúa como un seguro válido para todo riesgo. No. Si Jesucristo es nuestra medida, piensen que El tiene que ser también la única seguridad. ¿Y cuál es esta seguridad? Pues bien, la única garantía que nos ha enseñado Jesucristo es esta:
Que tú, Fernando te digas: "Amaré tanto a Marcela, procuraré entenderla tanto, la perdonaré tantas veces, me sacrificaré tanto por ella, si es necesario padeceré tanto por ella, que acabará por descubrir que realmente la amo"
Y que tú, Marcela, te repitas: "Amaré tanto a Fernando, procuraré entenderlo tanto, lo perdonaré tantas veces, me sacrificare tanto por él, si es preciso sufriré tanto por él, que no tendrá más remedio que descubrir que lo amo".
Vivan cada Eucaristía, cada oración, ahí esta la clave, porque nada se alcanza con el esfuerzo humano, nadie lo logra solo.
Dios busca al hombre, Dios quiere amarlos.
El Beato Juan Pablo II decía; “déjense encontrar por Dios” Jesús nos va buscar hasta dar la vida. No nos neguemos la posibilidad de encontrarnos con Jesús, "El lo da todo y no exige nada a cambio" nos dice el querido Papa Benito XVI
Solo porque Jesús es fiel, nosotros podemos ser fiel, el es nuestra fuerza, no teman, abran las puertas de su Matrimonio, abran de par en par, y esto significa totalmente si condicionamiento, así como están ahora.
Al celebrar el primer año piensen ¿Cuántas veces fui fiel al llamado de Dios? no tengan miedo a ser diferentes, si el amor no tiene la primera y última palabra, entonces ¿para que vivir?