jueves, 24 de octubre de 2013

Ir a Egipto


Silvana y Guillermo celebran el 4to cuarto Aniversario de su Matrimonio, lo hacemos en un clima de huerto y en Familia. Andando los últimos senderos en estos 3 largos años Dedicado a la Sagrada Familia de Nazaret, pidamos a María Santísima y San José, que poniéndose cerca de nosotros nos enseñen ese arte de ser humildes que los caracterizo y los hizo capaces de ver en el rostro del niño Jesús, el rostro mismo del amor de Dios.

Es frecuente ver, sentir y percibir, en las relaciones humanas, entre compañeros de estudio, trabajo, en los noviazgos y en los Matrimonios, ya no se usa la palabra “siempre”, se le tiene miedo… se le considera como algo que “hay que arrastrar” que “ya no va más” “cursi y anticuado”  y lo que nos queda es una vida vacía… que  termina evadiéndose por lo frívolo, muchas veces por lo mentiroso que termina destruyendo al hombre. El Beato Juan Pablo II cuando visito Argentina Celebro la Santa Misa a millones de Familias y les dijo: "El que no aprendió a querer para siempre no sabe lo que es el amor." Al querer acallar a Dios, se termina destruyendo el hombre. La muerte de Dios termina siendo la muerte del hombre.

Luego de vivir una inconmensurable alegría, por el nacimiento del niño Jesús, contemplar a los ángeles del cielo cantar alabanzas y recibir a los humildes pastores que venían adorarlo, la Sagrada Familia debe huir a Egipto con rapidez, porque Herodes buscaba al niño para matarlo.

Ir a Egipto, es viajar a la tierra testigo de la liberación de la esclavitud del pueblo de Israel por parte de Dios. En el fondo ¿qué es lo que ataca a las familias? ¿Acaso no son las diversas esclavitudes que oprimen a la Familia que no la deja encontrar el verdadero rostro de la libertad y que no permite al hombre y a la mujer realizarse en el hogar, en un amor total sin condicionamiento, abierto a la vida y al gesto de ser amados por Dios?Entre las esclavitudes están; los vicios, los malos entendidos, los encuentros y desencuentros, las suposiciones, los gestos de desprecio, las promesas incumplidas, el silencio mediocre, el egoísmo llevado a expresiones demasiadas fuerte…  el esperar que el otro de el primer paso, confundir el medio con el fin, el creerme el mejor que el otro, al final nos terminan aislando… y terminamos esclavos de nuestros propios miedos…

Ir a Egipto significa mirarnos en el espejo de Dios y ver que pensaba… Dios de nosotros.
Ir a Egipto es escuchar por parte de Dios; YO SOY tu PADRE.
Ir a Egipto es redescubrir que puedo volver a empezar, desde la familia.
Ir a Egipto es vivir la experiencia de la propia fragilidad…
Ir a Egipto es humanizarse.
Ir a Egipto significa volver amar y redescubrir el asombro de amar y ser amado.
Ir a Egipto significa callar el ruido de la memoria… y aprender a perdonar.
Ir a Egipto significa redescubrir y recrear los sencillos gestos de amor que se marchitaron por el paso de los años.
Ir a Egipto significa escuchar…
Ir a Egipto ¿qué significa…?

¿Cuáles son las esclavitudes que no te dejan vivir…? ¿Cuáles son las cadenas… que pones al otro? No temas el Señor acompaña siempre, solo El puede recrear tu Egipto y hacer brotar del desierto mas seco vida.

Benito XVI nos decía: Toda persona siente el deseo de amar y de ser amado. Sin embargo, ¡qué difícil es amar, cuántos errores y fracasos se producen en el amor! Hay quien llega incluso a dudar si el amor es posible. Las carencias afectivas o las desilusiones sentimentales pueden hacernos pensar que amar es una utopía, un sueño inalcanzable, ¿habrá, pues, que resignarse? ¡No! El amor es posible.

saben una cosa, nosotros, muchas veces, pensamos nuestros proyectos de vida, queriendo hacer sólo lo nuestro y queriendo que los demás giren a nuestro alrededor, y al final nos quedamos solos.


Que María Santísima y San Jose, la Sombra del Padre, nos enseñen ese arte de ser humildes que los caracterizo y los hizo capaces de ver en el rostro del niño Jesús, el rostro mismo del amor de Dios. Si Dios quiso reflejarse en un niño también quiere reflejarse en Ustedes.

domingo, 20 de octubre de 2013

una infancia dormida


Uno valora las cosas / Cuando las suele perder
Y cuando las tiene a mano / Nunca las sabe tener
Lo cierto es que al darnos cuenta / Ya muy tarde suele ser

Yo que he perdido a mi madre / Cuando empezaba a crecer
Cuando tenerla a mi lado / Era jugar a aprender
Lloramos con mis juguetes / Al vernos sin tu querer

Si se quedo mi infancia / Sola llamándote
Solo Dios sabe las veces / Que me vio buscándote
Solo Dios sabe las veces / Que he preguntado porque

Uno le debe a su madre / Su vocación de enseñar
A dar los primeros pasos / A comer y a deletrear
Y a sus canciones de cuna / A su paciencia y su paz

Mi madre son los recuerdos / De veranos junto al mar
Que la arena de los años / Nunca han podido borrar
Porque los llevo vestidos / Con tu ternura mama

Si se quedo mi infancia / Sola llamándote
Como no he de recordarla / Si yo nunca la olvide

Si yo no tengo quien cosa / Los parches de mi niñez


Letra y Musica - Facundo Saravia